¿Por
qué debemos de estar enterados del alza en las tasas de interés?
Con el alza en las
tasas de interés por parte de la Reserva Federal y el Banco de México, el costo
del dinero será mayor, por lo que en algunos casos, los créditos pudieran
encarecerse, impactando directamente el ingreso disponible que los agentes
económicos tienen en sus bolsillos.
Por:
Antonio Mañón M.
El 16 de Diciembre de 2015 el Comité
Federal de Mercado Abierto de la Reserva Federal (FED por sus siglas en inglés),
responsable de definir la política monetaria en Estados Unidos, decidió elevar
la tasa de interés de los fondos federales en 25 puntos base, después de casi 7
años en que las tasas en dicho país rondaron niveles cercanos al cero, abaratándose
así, el costo de financiamiento tanto para el consumo como para las actividades
productivas. Lo anterior, como una medida anti cíclica para incentivar la
demanda interna después de vivir en 2008 una de las crisis con mayor impacto a
nivel global.
Asimismo, un día después, el 17 de Diciembre
de 2015, el Banco de México en su reunión de política monetaria, decidió seguir
los pasos de la FED y aumentar en 25 puntos base la tasa interbancaria; lo
anterior, con el objetivo de evitar la fuga de capitales invertidos en nuestro
país por ser más atractivas las inversiones en dólares americanos, así como
estabilizar el mercado cambiario.
El alza de las tasas de interés en Estados
Unidos, se da en respuesta a la recuperación de su economía y se vendrá dando gradual
y ordenadamente durante 2016, en la medida en que su economía crezca y se mantengan
niveles controlados de inflación.
Este movimiento de tasas de interés tiene
un impacto directo en la economía global, en especial en las economías
emergentes, donde los inversionistas institucionales refugiaron sus inversiones
en los últimos años en que el crecimiento económico de Estados Unidos fue nulo
como consecuencia de la crisis inmobiliaria.
Con esta alza en tasas por parte de la
Reserva Federal y el Banco de México, se espera que se estabilicen los mercados
internacionales, en específico, el cambiario, el cual ha sufrido de altas volatilidades
en los últimos meses, dado las expectativas que tienen los agentes económicos
de obtener mejores rendimientos en dólares americanos, vendiendo sus posiciones
en otras divisas.
Por otro lado, los banqueros han sido muy
optimistas declarando que la banca se encuentra en su mejor momento, con
indicadores financieros sólidos y con gran capacidad para prestar. Asimismo, se
ha descartado que esta alza en tasas de interés afecte la capacidad de pago de
los usuarios de servicios financieros y se prevé que se mantengan sin cambio,
por lo menos en el corto plazo, las tasas de productos que están fondeados a
largo plazo como es el caso de los créditos hipotecarios, empresariales y de
consumo.
No obstante lo anterior, los años 2016 y
2017 no serán fáciles para México, en especial para la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público como entidad responsable de las finanzas públicas del país. El
panorama de bajos precios del petróleo y una inminente alza en las tasas de
interés no es muy alentador. En perspectiva, la deuda en dólares se encarecerá,
siendo que los ingresos petroleros seguirán viéndose afectados por la baja en
los precios del crudo mexicano, sin embargo, nuestros servidores públicos son
optimistas y señalan que estos efectos negativos se compensarán con la
recuperación económica de Estados Unidos, quién es nuestro mayor socio comercial,
impulsando a través de las exportaciones el crecimiento económico de México.
La situación económica mundial es muy
retadora, no obstante, el sistema financiero mexicano está capitalizado y es
uno de los más sólidos de Latinoamérica. Las condiciones están puestas para que
la banca preste dinero e impulse el desarrollo económico nacional, muestra de
ello es la fuerte competencia entre bancos en ciertos productos como los son créditos
de nómina, hipotecarios y automotrices.
Está iniciando un nuevo ciclo de política
monetaria y terminando un periodo prolongado de tasas de interés bajas, es
prácticamente la última llamada para solicitar un crédito en condiciones
históricamente favorables, ¡aprovéchelo de forma responsable!
Antonio
Mañón Macías
Ingresó a Grupo Financiero Banorte en 2009 al área de Banca Corporativa en la cual desarrolló la relación de negocio con diferentes clientes, participando en el financiamiento de proyectos de inversión tales como parques eólicos, centros comerciales, hoteles y edificios corporativos.
Asimismo, participó en el área financiera
del Programa de Transformación del Banco, analizando y cuantificando los
beneficios y costos de cada proyecto así como definiendo indicadores de
desempeño (KPIs) para dar seguimiento a los resultados del programa.
En 2014 ingresó al área de crédito de la
banca minorista analizando y mejorando el proceso de crédito para PYMES.
Actualmente es Subdirector de Crédito
responsable de los productos de Crédito Hipotecario y Automotriz y
representante de Banorte en las Asambleas de Accionistas de Trans Union y Dun
& Bradstreet (Buró de Crédito).
Es profesor de Valuación de Empresas,
Financiamiento de Proyectos, Presupuestos y Estructura de Capital en las
Maestrías de Finanzas y Administración de Proyectos de la Universidad
Panamericana (UP).
Ocupó el cargo de Presidente del Club de
Banca y Finanzas en el Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresas
(IPADE) durante sus estudios de maestría.
Es Economista por la UP, Maestro en
Administración de Riesgos por la misma universidad y Maestro en Dirección de
Empresas (MBA) por el IPADE. Ha tenido estancias académicas en la Pontificia
Universidad Católica de Chile en Santiago; en la Indian School of Business en
Hyderabad y en la China Europe International Business School (CEIBS) en
Shanghái.